AMISTOSO: VELEZ 1 - ARGENTINOS 0

Fue un enemistoso

Vélez le ganó 1-0 a Argentinos en un partido que empezó con onda pero tuvo mucha pierna fuerte. Igualmente, en el final hubo saludos



Las imágenes de los Juegos Olímpicos habrán sido un elemento de inspiración. Quizá porque el recuerdo aún queda en la retina. ¿De fútbol? Mmhh, parece que los muchachos se coparon con las disciplinas de lucha y aprovecharon para desplegar tomas soñadas en el amistoso de ayer. Así, con la testosterona en su máxima expresión y con las ganas un tanto desbocadas, Vélez le ganó 1-0 a Argentinos en un partido trabado, lleno de roces, que despertó más atracciones por la fricción que por la claridad. Poco. Muy poco. De hecho, la única jugada de peligro en los 70 minutos (dos tiempos de 35), llegó en consecuencia de... ¡Una infracción! Matías Arce, el más flojito del encuentro (no cumplió en su rol, hizo el penal, y además se salvó de la expulsión porque era un "amistoso"), le cometió falta en el área a Mauro Zárate tras una escalada por derecha. El técnico Alberto Fanesi le delegó la responsabilidad a Leandro Somoza (también le quería pegar Jonás Gutiérrez) y el más claro en un panorama poco favorable se vistió de Roly por un instante (el delantero no estuvo por su lesión en el tobillo derecho) y la colocó junto al palo izquierdo de Marcos Gutiérrez. La figura se lució porque siempre abrió hacia los laterales y estuvo atento en los anticipos, al igual que Pellerano y Fuentes. Y eso que enfrente tuvieron a Gastón Casas, quien desestimó los prejuicios (está falto de ritmo) y fue el mejor del Bicho: la bancó de espaldas y descargó para le llegada de los volantes.El espejo táctico no favoreció al jogo bonito. Fanesi, que suele arrancar con un volante de creación, innovó con un 4-4-2 que no lo convenció para nada. "No me gusta este sistema porque a nosotros nos gusta jugar en campo contrario, y este esquema nos obliga a estar cerca de nuestro arco", contó el entrenador de Vélez. Por su parte, el Checho Batista ratificó ese planteo, que es el que habitualmente utiliza, y también reconoció sus errores: "Las dos líneas de cuatro te dan seguridad en el medio. No voy a modificarlo. Nos falta trabajar variantes de ataque: no puede ser que lleguemos a tres cuartos y no podamos concretar", dijo.Faltó creación. La ausencia de un enganche en ambos equipos derivó inevitablemente en la fricción. Sin un líder que se cargue a los suyos, que busque el hueco y que le escape a los manuales, la distancia entre los volantes y los delanteros fue aumentando con el correr de los minutos. Y también influyó el cansancio, claro. "El rendimiento fue menor al esperado, porque hicimos una carga física importante. El plantel no tuvo descanso; le metimos muy duro en esta semana. Recién el lunes volvemos a la normalidad", aseguró Fanesi

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