El Príncipe soñado


El Bicho inició gestiones para contar con Redondo, a quien le gustaría retirarse en el club donde se inició y se fue de golpe.


En el Bicho no paran de sorprenderse. A cuatro días del batacazo en Córdoba que lo proyectó a la A, en el barrio comenzó a circular un fuerte rumor. ¿Vuelve Redondo? ¿Se quiere retirar acá? Esos interrogantes, tomaron más fuerza cuando el Príncipe demoró una oferta de Newell´s, porque quería esperar la definición del ascenso de Argentinos. "Según trascendidos, a Fernando le gustaría retirarse en el club. Sé que ahora está en Rosario y a su vuelta conversaré con él. Nuestra oferta no puede ser muy jugosa en lo económica, pero sería bárbara su vuelta. Lo de otros casos, sí son casi imposibles (Leonel Gancedo y Cristian Traverso)", señaló el presidente Luis Segura, confirmando la ganas de los de La Paternal de tenerlo de nuevo.

La historia de Redondo con el Bicho comenzó a puro romance. Debutó en el 85, en el mejor momento deportivo de la historia del club. Fue suplente hasta que el Checho Batista (casualmente el actual DT) pasó a River. Tuvo dos años de gran nivel, hasta que en el 90, un supuesto error administrativo de la dirigencia de aquel entonces (ciclo de Domingo Tesone como presidente) provocó que todo el plantel quedara en libertad de acción. Fue cuando Fernando, al igual que Silvio Rudman, negoció su pase por su cuenta y recaló en Tenerife, para luego pasar al Real Madrid y Milan. No gustó a la hinchada la decisión del cinco. Pero en el Bicho no son rencorosos. Un ejemplo: Esteban Cambiasso se fue de golpe cuando estaba en la Quinta (con el tiempo, el club cobró derechos de formación) y la gente lo recibió bien durante la reinauguración del estadio. Por eso, la mayoría da el visto bueno.

Jugó poco, Redondo, en el Milan. Sólo 8 partidos en el Scudetto de la última temporada, y 6 en la Copas (sin goles). A los 35 años lo seduciría la chance de volver al país, estar cerca de la familia y en su club de origen, a pesar de contar con algunas ofertas de Europa y Asia. ¿La Paternal tendrá de vuelta a su Príncipe?

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