Argentinos hizo más, pero falló a la hora de definir

Con el debut de Chiche Sosa como técnico, Argentinos logró su primer punto en su estadio. Almagro no tuvo potencia en el ataque.



Definición es la materia donde fallaron Argentinos y Almagro en un partido con demasiados altibajos y caídas de tensión notorias en el nivel. Aunque es necesario aclarar que los motivos porque ninguno de los arqueros debió darse vuelta para sacar la pelota de sus arcos se debió a motivos bastante diferentes.Argentinos chocó con un Bernacchia que, nuevamente, fue figura. El 1 de Almagro le sacó un mano a mano a Oberman, habilitado por Pisculichi, a los 38 y después le tapó un remate a Pisculichi, que recibió sólo sobre la izquierda un pase cruzado de Arce, a los 42 del primer tiempo. Bernacchia volvió a negarle el gol a Argentinos en el segundo tiempo: tapó el derechazo de Arce a los 29 y de Pisculichi a los 34.Y cuando el arquero de Almagro no fue héroe, apareció el travesaño, como en el frentazo de De Muner a los 36 minutos.En cambio Almagro ratificó que el gol no es su especialidad en este retorno a Primera. En los ocho partidos que jugó en este Apertura apenas gritó en dos ocasiones (Osvaldo Miranda en el 1 a 0 a Rosario Central y Diego Figueroa en el 1 a 1 con Huracán de Tres Arroyos). Es un equipo sumamente aguerrido y con mucha entrega y temperamento, que se para ordenadamente y busca salir con rapidez y sorpresa.Pero tiene grandes problemas a la hora de elaborar situaciones netas de riesgo frente al arco rival. Ayer, más alla de sus intentos en el segundo tiempo, cuando se aproximó bastante al área de Marcos Gutiérrez, solamente pudo contabilizar una oportunidad clara, que el arquero local le desvió a Castano a los 14 del segundo tiempo. Demasiado poco para un equipo que no puede catalogarse como defensivo, pero que sí tiene carencias en la faz ofensiva.El debut de Osvaldo Chiche Sosa, un hombre de la casa, no le permitió a Argentinos ganar por primera vez en su remodelado y coqueto estadio, pero al menos sumó allí el primer punto (en La Paternal había perdido con Instituto, Estudiantes y Newell's). Pero sí alcanzó este cambio de técnico para darle al equipo otra motivación, una actitud más ofensiva y un poco ?no demasiado? de tranquilidad a la hora de manejar la pelota.Arrancó Argentinos asumiendo, como correspondía, el protagonismo. Con mentalidad ofensiva y pelota a ras del piso, imponiendo su juego, llegando. Resistió Almagro sin desesperarse. En el segundo tiempo el equipo de Hrabina-Sánchez encontró espacios y lanzó a Cristian Rios por la izquierda, y después a Diego Figueroa, por derecha. Pero también quedó contado que a Almagro no le resulta sencillo elaborar acciones netas de gol.Los puntos valían muchísimo, por la situación de ambos. Eran 6 puntos y no 3, como suele afirmarse, y con razón, en estos combates del promedio. Y se quedaron con 1 cada uno. Por no saber definirlo y por méritos de un arquero.

La clave
Cinco oportunidades claras y ningún gol
Argentinos, mezclando virtudes nuevas y fallas viejas, dispuso de cinco chances claras. Bernacchia y el travesaño le impidieron festejar. Almagro aportó temperamento, orden y voluntad. Pero aunque emparejó, por momentos, el dominio, no elaboró peligro.


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