A Newell's le alcanzó con el fútbol del comienzo
Newell's fue claramente superior en el primer tiempo y sacó dos goles de ventaja. Pero Gallego hizo cambios para defender el resultado y se le complicó al final.

Desde muy temprano, en el perímetro externo, se planteó un partido aparte. Los de rojo y negro, a viva voz, mostraron que siguen a muerte con Marcelo Bielsa. También exhibieron unas banderas. Los de rojo pero con blanco respondieron instantáneamente: insultos para el renunciante Bielsa, augurios para Pekerman al frente de la Selección argentina. Mientras bajó el famoso "Es el equipo de José" unos hinchas desplegaron y colgaron una bandera contundente: "Chau Bielsa Gay/Para la Selección el mejor fútbol, el de La Paternal/éxitos José..."Era un duelo sostenido. Con mucho ingenio. Con energía. Los de Argentinos les pedían que ganasen una copa. Y los de Newell's que dejaran de bajar y subir... Pero abajo, en el campo de juego, sólo uno de los dos hacía honor a tanta historia, a una ideología futbolera bien marcada. El amo y señor era el Newell's de Américo Rubén Gallego: jugó un primer tiempo brillante, vapuleó a Argentinos, consiguió dos goles de diferencia y contaba con superioridad numérica por la temprana roja de Luis Medero.Pero un cambio de piezas del entrenador (hizo ingresar a un defensor, Hugo Iriarte por Capria) y un penal que sancionó Angel Sánchez "emparejaron" la cosa. Sin embargo, y más allá de algún sobresalto, el 2 a 1 de la visita, que se prende bien arriba, al fin y al cabo, resultó ser tan escueto como justo.Ya desde el mismísimo arranque quedó clara la postura de uno y otro. Los rosarinos iban e iban al frente. Mientras, los de La Paternal, hacían lo que podían. Fernando Belluschi probó de todos lados. Una vez la tiró lejos. La otra dio en el travesaño después de un concierto de errores entre Marcos Gutiérrez y Carlos Galván. Pero la tercera fue la vencida. El tiro libre del Mago Capria fue peinado por vaya a saber quién y el rebote le quedó para que la derecha del mediocampista se incrustara en un ángulo.Newell's seguía jugando al fútbol que le gusta a la gente. Con la dinámica de Belluschi. Con el corte de Ariel Rosada. Y con la solvencia de Sebastián Domínguez. Argentinos había cruzado el borde de un ataque de nervios. Esta descontrolado. Todo empeoró cuando Ré puso la cabeza para el segundo gol. A la gente local se le acabó la paciencia en ese instante. Pidió la cabeza de Sergio Batista e insultó a Kmet, Galván, Gutiérrez y Piriz Alvez.El Checho puso a Pisculichi por Kmet. Y ahí hubo una tibia pero reacción al fin. Pero se desprotegió atrás. Ya estaba jugado y regalado. Dio todo tipo de ventajas. Y se mantuvo con vida por la inoperancia de sus delanteros para sentenciar la victoria en una de las tantas contras que generó.Pero Gallego, al dejar un solo punta (Lucio Cerezetto) también fue cómplice. Encima perdió a Iriarte rápidamente por una infracción que era para tarjeta amarilla. Y Newell's se metió todo atrás. Y empezó a sufrir.A 10 minutos del final Angel Sánchez vio un agarrón de Vella a Piriz Alvez. Penal que Piscu se encargó de cambiar por el descuento. Después llegó el aluvión de rojas (dos para la visita, Rosada y Vella y una para los locales, Piriz Alvez) y el partido mutó de tal manera que pareció un picado entre solteros y casados. Pero el manotazo de ahogado no llegó. Entonces, el duelo futbolero quedó para el que más se aferró a su propia historia.
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