EL CAMPEON APENAS EMPATO COMO LOCAL ANTE ARGENTINOS JUNIORS: 1-1

Newell's volvió a dejar en el camino puntos valiosos


Como le ocurriera en el Parque ante Central y Colón, buscó la victoria, pero no supo resolver. Hubo un corte de luz que detuvo el partido casi 20 minutos.




No hay caso. Jugar en su estadio, abrigado por el afecto de su gente, se ha convertido en una diligencia traumática para Newell's. Se podrán encontrar mil razones: azar, presión o la mezquindad de ciertos adversarios. Lo cierto es que el último campeón argentino sufre dejando en el camino esos puntos que, más tarde o más temprano, terminan definiendo la estatura de una campaña. Y el empate, como anoche con Argentinos, como en las fechas anteriores ante Central y Colón, se ha convertido en Rosario en una ingrata costumbre para el conjunto que conduce Ribeca. Y así, el sueño de repetir, aquel que se planteó antes de iniciar el torneo, comienza a desvanecerse.

Repitió trazos gruesos de sus últimas presentaciones Newell's: dominó la pelota y el terreno. Contó con las mejores situaciones. Pero tropezó con algunos escollos severos. Diluyó todo el capital que acumuló desde el juego entre la falta de puntería ?algo que también reitera, y mucho? y las manos de Gutiérrez. Argentinos fue pura astucia. Poco le importó el juego. Y la imagen de sus jugadores haciendo tiempo, después de una falta o antes de ejecutar una acción con pelota detenida, se repitió durante los 90 minutos. Cero en espectáculo para la visita, que se salió sin embargo con la suya y terminó cerrando un negocio de máxima rentabilidad.

El partido, se dijo, tuvo a un equipo preocupado en marcar diferencias. Desde el comienzo Newell's llevó la iniciativa, empujado por las gambetas de Ortega y la movilidad de Scocco. Así comenzó a convertirse en figura Gutiérrez. En Argentinos no aparecía Pisculichi, bien tomado por Rosada, y los delanteros quedaban aislados.

Pero de tanto ir Newell's comenzó a confundir el camino, a transitar la cancha con desorden, dejando amplios espacios en su defensa. Así llegó el gol de Argentinos tras un rápido ataque que cerró con precisión goleadora Marini. El local parecía atrapado en la telaraña que tejió su rival. Ortega lucía desencajado, molesto por los fallos del árbitro, y Villar debía revolcarse para evitar el segundo ante un remate franco de Carrario.

Las sombras de la derrota comenzaban a cubrir a Newell's, que siguió de pie empujado por arrestos individuales. Gutiérrez se quedó con un tiro deficiente de Capria y con una carambola de Esnaider. El arquero aguantó hasta donde pudo: a los 29 fue vencido por un fuerte remate de Spolli. Newell's tuvo un par de chances, pero debió conformarse con un empate tan repetido como amargo. Argentinos se aferró al resultado. Y fue, claro está, el gran ganador de la noche.


LA CLAVE: La astucia pudo con la falta de definición

La astucia que demostró Argentinos en el transcurso del partido le permitió llevarse un premio que pareció excesivo. Del otro lado, Newell's buscó siempre, pero en los metros finales se le nubló la vista, no supo definir sus oportunidades y lo pagó caro.

El día del abrazo

Antes del partido hubo clima amistoso. Rosada saludó a Sosa, quien lo dirigió en Chacarita. También se saludaron Capria y Mignini, dos ex Chaca; los jujeños Marcos Gutiérrez y Ortega; y los paraguayos Morinigo y Villar.


Una polémica a media luz

En el mejor momento del partido, un corte de luz amenazó con la suspensión. No obstante, el árbitro Sánchez explicó: "Sé lo difícil que es organizar todo esto. No quiero perjudicar a nadie. Vamos a esperar". Ante esto, y después de que un operario adelantara que tardarían casi 20 minutos en recuperar la energía, hubo dos opiniones. Por un lado, los de Newell's, que querían seguir jugando para buscar la victoria. Por el otro, los de Argentinos que, cómodos con el empate, preferían volverse a casa.

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