Para los hinchas del Bicho, el 2004 fue, es y será no apto para cardíacos. Todo empezó en enero en la reinauguración oficial de la cancha en su barrio, contra San Martín de Mendoza, una flor de emoción tras 20 años de deambular por Ferro, Atlanta, Mendoza y hasta ¡Miami! Claro, había otro objetivo primordial para su historia: volver a Primera. Y para conducir el timón del regreso se eligió a un prócer de La Paternal: el Checho Batista. Arrancó bárbaro, pero el bajón en el final del Clausura interrumpió un poco el optimismo. Comenzó a flotar un nuevo mote por las dos finales perdidas del año pasado. "Son el nuevo Quilmes", sonaba. Eso no pasó, porque el plantel respondió a la historia de Primera del club. Ascendieron en la más difícil. Le ganaron la Promo a Talleres, 3ø en el torneo, y le dieron la segunda alegría del año al hincha, que ahora esperará celebrar los 100 años en la A. Gracias a ellos...

Ayer disfrutaron con sus familias, descansaron y por la noche participaron de la cena del festejo en la Cantina de David. ¡Ojo! Todo comenzó antes en Córdoba. El redoblante, comprado por el plantel en Mendoza para levantar ánimo, aturdió en el micro de vuelta, que arribó ayer a las 9 a la Capital. "Todavía me suena en la cabeza", tiró Batista, quien fue clave, según el grupo. "Su llegada fue importante, es un gran técnico," dijo la Hiena Arce, recuperado por el Checho.

Sí, un grupo con disciplina, pero muy jodón. A la hora de las bromas, "Bidal y el Pelado Calabrese, son los más hinchas", dijo Velázquez, a quien la mayoría gasta por su buen apetito. "El Polo es el que más come y duerme", se defiende el paragua. Los pibes son los que mejor andan al playstation, como el arquero Diego Morales. "Todos queremos sumar por encima de todo. Los que no están por lesión o no juegan, siempre acompañan", tiró De Muner, quien con Pérez Castro es el de más batallas en el Tifón de Boyacá.

El "La Paternal, La Paternal" suena fuerte. Tiene un sabor especial el volver a la A con casa propia y ante tamaño rival, en una chance en la que nadie apostaba un peso. Y parece que los Tallarines le caen bien al Bicho, porque se le ganó el ascenso en el 97, contra ese cuadro debutó el Diego en el 76, y la mayor goleada de la historia fue un 12-0 con el equipo que ganó todo en el 84/85. Ahora, el próximo festejo será a todo trapo el 15 de agosto. ¿Por qué? Es el centenario y se celebrará en Primera, obvio.