ARGENTINOS FUTBOL Y TOQUE

lunes, octubre 25, 2004

Argentinos aprovechó el desconcierto de este Boca

Con un golazo de Pérez Castro y un desempeño sobrio, Argentinos triunfó merecidamente.




Si es auténticamente cierto que los aspectos psicológicos tienen tanto valor en el juego del fútbol como los argumentos técnicos y tácticos, Boca dio otra prueba ayer en su derrota ante Argentinos Juniors. Porque se pareció a un equipo vacío de ideas y de sentimiento. Como si esta costumbre de no ganar de los últimos partidos le hubiera recortado el orgullo que identificaba a su actitud en tiempos anteriores y cercanos. Entonces, la situación parece tomar una gravedad futbolera picante. Su gente, la fiel hinchada, pareció haber llegado al límite de la impaciencia y lo manifestó en el reclamo de sus cánticos. Y la sombra de la ausencia de Carlos Tevez por unas vacaciones inconvenientes tomó una dimensión impensada que alcanzó al propio jugador y a los responsables de la medida (el técnico Miguel Brindisi y los dirigentes que la avalaron). Por eso Argentinos se dio el lujo de aprovechar la circunstancia con un desempeño sobrio, un esquema ordenado, algunos buenos rendimientos individuales y la concreción de un estupendo gol. Quedó la evidencia: en un partido sin grandes relieves, el equipo local fue claramente superior. Por concepto y por entrega. Y en la vuelta del encumbrado rival a su propia casa después de 44 años festejó el acontecimiento de la victoria con una euforia expresiva y particular.El técnico Brindisi decidió una formación con línea de cuatro defensores (contra Banfield había designado a tres) que significaba un ejemplo más de la inestabilidad de la propuesta. Se supone que los cambios de dispositivos tácticos reiterados terminan por comprometer la identidad de un equipo. Al cabo, ingresó José María Calvo, un defensor, por el ausente Tevez. Y esto se parece a un síntoma. Más si se sabe que ni Morel Rodríguez, especialmente, ni el ingresado son laterales de subidas sorpresivas y profundas. Boca apostó, entonces, a la vieja fórmula de Guillermo Barros Schelotto y Palermo como vertiente ofensiva. Pero el mellizo no está en su mejor forma y el delantero central ya no se ubica como farol llamador en el área. Y la línea de cuatro volantes, con Neri Cardozo algo más suelto, pareció esquemática, repetida, irresoluta, sin vuelo creativo.Frente a eso, Osvaldo Chiche Sosa, el mentor ?convaleciente? y José Manuel Pistola Vázquez, el ejecutor, armaron un dispositivo que los jugadores de Argentinos cumplieron con criterio. Presionaron y anticiparon en la zona. Pero una vez conseguida la pelota con Claudio Marini como excelente bastonero, le dieron un destino más seguro. Gastón Machín lo respaldaba a su derecha y Pérez Castro, a su izquierda. Leonardo Pisculichi cumplía función de armador y Oberman se encargaba de desbordar a Calvo cada vez que lo enfrentaba. Piriz Alvez, menos efectivo, no tenía problemas con el dubitativo Morel Rodríguez. Sin embargo, también le faltó profundidad al equipo local.Un par de tiros desviados de Piriz Alvez, uno de Palermo, otra aproximación de éste, fueron simples excepciones. Hasta que un error de Marcos Gutiérrez casi posibilita el gol de Boca. Sacó mal, la recibió Guillermo, gambeteó a dos pero el arquero se corrigió y desvió al córner. Después, una clara mano penal de Traverso ?ante un centro de Oberman? no fue sancionada por el árbitro Oscar Sequeira (era difícil de ver desde su posición). Parecía que terminaba en cero la primera etapa, pero una gran jugada del local abrió el marcador. Piriz Alvez le puso el balón a Oberman quien le ganó a Calvo y enganchó para adentro. Perez Castro, que llegaba, se llevó el balón y desde ángulo cerrado venció a Abbondanzieri.Poco y nada influyeron las variantes ofensivas (Donnet por Cardozo y Cangele por Morel) dispuestas por Brindisi. Boca se quedó con la posesión de la pelota, en el segundo tiempo, y Argentinos retrocedió con la intención de contraatacar. Uno de Oberman, quien habilitó a Pisculichi y terminó con un remate desviado de Seltzer, estuvo cerca. Y cerca pasó el cabezazo de Ormazábal (reemplazante de Ledesma) en los instantes finales del partido.Al cabo, ganó con justicia Argentinos. Y lo festejó a lo grande. Boca quedó encerrado en un desconcierto que pareció paralizarlo y le compromete el futuro. Porque la punta, ahora, parece una referencia demasiado lejana.


LA CLAVE:
Algunas individualidades y también un buen planteo

Boca llegó a La Paternal asfixiado por su incertidumbre y la polémica ausencia de Tevez y, al cabo, se pareció a un equipo vacío de ideas y sentimiento. El sobrio planteo de Argentinos y el buen desempeño de algunas individuales le dieron un triunfo merecido, coronado por un excelente gol de Pérez Castro en la primera etapa.

Chiche y Pistola: el terror de los grandes

José Manuel Pistola Vázquez, técnico alterno de Argentinos, le dedicó el triunfo del equipo de La Paternal a Osvaldo Chiche Sosa, su superior, o mejor dicho, el entrenador del club, que siguió el partido desde su domicilio porque se recupera de una operación de cadera."Vos sabés que este triunfo te pertenece", le dijo por teléfono. Vázquez, al referirse al desarrollo del juego, señaló: "Los muchachos taparon todos los huecos, cortaron los circuitos futbolísticos del rival. Somos el terror de los grandes."Lleno de felicidad, Pistola Vázquez también le dijo a Chiche Sosa: "Nosotros ganamos, ahora te pedimos que nos pagués el champán prometido." Y Sosa, desde el otro lado de la línea telefónica, replicó: "Está bien, yo pago el champán, pero hacé rápido la colecta para el bastón, porque si no no me puedo mover de acá. Si me traen el bastón, el miércoles aparezco en las prácticas."




"Fue el gol más importante de mi vida y fue un golazo"



Esa camiseta número cinco de Argentinos Juniors es el símbolo de una escuela. Está abrazada a un pasado de gloria y a jugadores inolvidables: volantes centrales de buen manejo, de entrega y coraje, de mucha historia. Esa camiseta, la del Checho Batista, la de Fernando Redondo, la de Esteban Cambiasso, la del Pipa Gancedo, la de Cristian Ledesma, no quiere resignarse a ocupar un papel secundario. Y, ayer, esta vez encarnada en Facundo Pérez Castro, esa camiseta volvió a dejar una marca en el corazón de los hinchas. Esta vez le tocó a él, a Pérez Castro. Cuando se terminaba el primer tiempo y Argentinos se le animaba a Boca, armó una jugada fiel a su camiseta: dominó la pelota entre dos defensores, conectó un derechazo que se clavó en el ángulo izquierdo de Abbondanzieri y anotó el gol que le dio la victoria a su equipo. "Fue el gol más importante de mi vida. Y fue un golazo. La verdad, no me imaginaba definir así", aseguró cuando el triunfo era un hecho. Claro que este cinco, que desató la euforia de los hinchas en el Estadio Diego Maradona, tiene una particularidad: no jugó, como lo hace habitualmente, de volante central (ese lugar lo ocupó Claudio Marini), sino que se movió por izquierda, un puesto que venía ocupando durante los últimos partidos. Esa, para él, fue la clave para poder llegar a convertir. "Esta nueva posición me permite poder encarar más en la ofensiva, tener más llegada y mayor volumen de juego. Eso aportó para que hiciera el gol", sostuvo. Y agregó: "Por ahí jugando donde lo hacía antes no podía llegar tanto. Igual, uno viene buscando el gol siempre, en todos los partidos. Hoy (por ayer) se me dio. Y justo contra un grande..." El tucumano, que por estos días inauguró un comedor para 40 chicos en su provincia natal, también analizó el encuentro. "Sabíamos que el que ganara la mitad de la cancha iba a ganar el partido. Teníamos que hacernos fuertes ahí. Y lo logramos."La remontada de Argentinos en las últimas fechas sorprende. Ya lleva cinco partidos invicto, con dos victorias y tres empates, desde la llegada de Chiche Sosa. Opina Pérez Castro: "Por ahí cuando llega un cuerpo técnico nuevo se dan algunos cambios porque se refuerzan las esperanzas para los futbolistas que no vienen jugando. El plantel está unido y muy confiado. Por suerte, pudimos salir de esa rachita que veníamos sufriendo." Su gol hizo que Argentinos venciera a Boca en su estadio después de 44 años. Por eso el cinco, como tantas otras glorias del club, será recordado.

Qué se dijo

Gustavo Oberman

"Terminé muy cansado. Sé que son mis primeros partidos en Primera y estoy muy contento con mi rendimiento y el del equipo."

Claudio Marini

"Este triunfo fue para nosotros, para Chiche Sosa, que está en la cama, y para el Checho Batista y su grupo, que armaron este equipo."

Luis Medero

"Es difícil hablar del contrario porque no quiero herir a nadie. Nos regalamos este triunfo. La alegría hoy es nuestra."




Incidentes cerca del estadio

Hinchas de Argentinos Júniors y Boca protagonizaron un incidente que no pasó a mayores por la rápida intervención policial. El hecho ocurrió antes de comenzar el partido en las inmediaciones del estadio. Según relató a Clarín un testigo presencial, "venía un grupo de 20 hinchas de Boca y, a tres cuadras de la cancha, desde los balcones de casas vecinas los de Argentinos les tiraron proyectiles". La policía detuvo a dos personas por "resistencia a la autoridad y averiguación de antecedentes", pero informó que no hubo heridos. Corrió la versión de que uno de los detenidos era el Rafa Di Zeo (jefe de la barra de Boca), pero a éste se lo vio en la tribuna, con La Doce. Además, hubo otros tres detenidos ?mayores de edad? por infracción a la ley de drogas (2373). La causa recayó en el juzgado en lo Criminal y Correccional Número 1 que tiene a su cargo la doctora María Servini de Cubría.


FUENTE