BOCA: BOCA VUELVE A LA PATERNAL 44 AÑOS DESPUES

Baile del Bicho con un dramático final



En aquellos tiempos Argentinos Juniors era Los criollos de la Paternal, Los bichitos colorados o el Tifón de Boyacá. Boca era los Xeinezes o, por ahí, cuando perdía La pizza se quemó. No existían ni los Bichos ni los Bosteros. Benito L contó aquel partido con final violento muchas veces. Los interlocutores escucharon el mismo relato una y cien veces en esas noches de invierno en que no hay mucho para hacer ni decir. Los mates ayudan a la nostalgia. Benito L fue testigo de ese último Argentinos?Boca, en aquella cancha con tablones de madera y un público parecido en lo fervoroso y distinto en sus gustos futboleros."Fue ese Argentinos del Rama Ramaciotti, de Pandito (Martín Pando) y de un grupo de jugadores que hacía del juego una delicia. Y que no salió campeón nunca se supo bien porqué. Boca era el Boca de figuras incorporadas como Roma, Marzolini, el peruano Benítez, Valentim, Grillo, Yudica", aseguró Benito L y agregó que un desafío mano a mano entre un poderoso y un chico hacía hervir la sangre. Y cuando la sangre está en ebullición cualquier cosa podía pasar. Y ahí arrancó con lo que pasó, hace más de 44 años, un 2 de octubre de 1960. "El clima estaba calentito. Antes no se gritaban tantas canciones hirientes para los contrarios. Pero me acuerdo que los de Boca cantaban algo así como "en la cancha de juguete le vamo a rompe el oj...". Y los de Argentinos, atrás de un arco no se quedaron atrás. En el interín de la tercera y la reserva, porque antes se jugaban tres partidos, unos pibes de Argentinos se saltaron al campo de juego van a la popular y les tiraron unos piedrazos a los de Boca. Y estos que se treparon al alambrado para meterse en la cancha, mientras otros muchachos más grandes de Argentinos se metieron rápido y sacaron una bandera que iba de palo de córner a palo de córner pegada al alambrado con la inscripción Los criollos de la Paternal, mitad roja y mitad blanca".Benito tomó aire y siguió: "Antes de empezar la primera, los de Boca mostraron una bandera de no más de cinco metros, toda roja con las iniciales AAAJ, robada seguramente. Y al rato apareció un dirigente de Boca pidiendo que la devolvieran. Y nada. En ese interín, quince o veinte de la hinchada visitante, los más revoltosos, fueron a la esquina que separaba la tribuna lateral de la de atrás del arco local tratando de forzar la puerta. Me acuerdo que un flaco alto de Argentinos, con un matagatos (una pistola que disparaba balines) los tuvo a raya y ninguno se le atrevió. Enseguida llegó la cana y todos se olivaron. Antes un sólo cana paraba a 20 tipos. ¡Mirá ahora! En el partido, Argentinos le dio un baile histórico a Boca. La impotencia y la bronca por la milonga hizo que algunos comenzaran a arrancar los paraavalanchas. Me acuerdo del gol de penal de Valentino, de la expulsión de Valentim. Tengo presente que ese domingo Racing le metió 11 goles a Central porque uno tipo mirando el cartel del Alumni dijo: ¡Qué le pasa a Rosario! Sé que cayo un cuchillo cerca de Ditro, el tres de Argentinos, porque los de Boca cantaron "Grillo, Grillo, Grillo, la barra del cuchillo". Y apenas hizo el gol Hugo González me fuí porque venía pesada la mano". Del resto, Benito L dice que se enteró por la radio y lo vio en Sucesos Argentinos en el cine. Ese resto fue la invasión de centenares de hinchas de Boca al campo, que cometieron graves destrozos en la cancha y en los alrededores hubo gases y heridos. Aurelio Bosolino, el árbitro se fugó, igual que todos los jugadores. Benito L abandonó hace rato su peregrinaje por las canchas. Y le quedaron miles de recuerdos. Como este de Argentinos-Boca, cuando no había ni Bichos ni Bosteros, pero la fiebre de la violencia de vez en cuando se hacía notar. Mañana vuelve Boca a La Paternal, nada menos, casi medio siglo después. Que sea en paz.


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