El Tomba tuvo un recibimiento hostil

Hace una semana, el plantel de Argentinos llegó al Feliciano Gambarte con bombos, platillos e insultos. Ayer, la delegación de Godoy Cruz fue todo lo contrario, llegó en silencio y sin hacer lío, pero los inconvenientes los comenzaron a generar los mismos dirigentes, periodistas partidarios y controles de acceso de Argentinos.

Al llegar la delegación, los exaltados intentaron agredir a Carlos Suraci. Y los periodistas (¿periodistas?) partidarios del Bicho recibieron a escupitajos limpios a los jugadores desde las cabinas de transmisión. Además, un control no quería dejar pasar a Claudio Huertas. Un bochorno. Ahhh, usted se preguntará por la policía. Nosotros también.

La versión de la dirigencia

Alejandro Chapini, dirigente de Acción Deportiva, estaba en la delegación y fue el que salió a enfrentar los micrófonos: "Nuestra llegada a la cancha fue absolutamente normal, vinimos callados, en un colectivo pequeño, con las cortinas corridas, sin problemas. Pero cuando llegamos acá, pareció que había una operación de prensa o de los directivos (sic), que nos mandaron 20 o 30 matones, que no sé de donde salieron, y empañaron todo", señaló el directivo, pero no todo terminó ahí.

"No creo que todo haya estado orquestado -continuó el dirigente-, creo en la idoneidad de los dirigentes, pero fue extremadamente sugestivo que gritaran que les rompimos todo, cuando ellos, la semana pasada, llegaron a la cancha con bombos y gritando 'a estos p... le tenemos que ganar'. Los inconvenientes comenzaron la semana pasada, cuando un control nuestro le permitió el ingreso a un solo dirigente al camarín del árbitro, cuando están acostumbrados a entrar de a 10 o 12 para hablar con los árbitros, pero eso se solucionó".

La banda Tombina

Cerca de trescientos hinchas Tombinos fueron a alentar al equipo, una buena banda llevó el aliento que finalmente no alcanzó para conseguir la promoción. Igual se fueron aplaudiendo al conjunto por su entrega y los jugadores retribuyeron el apoyo tirándole las camisetas a la tribuna. Ya desde horas tempranas se pudo ver a los simpatizantes caminando por el centro de Buenos Aires y el obelisco fue el punto de encuentro para después trasladarse al club sito en el barrio La Paternal.

Karamelo Santo presente

La banda de música mendocina que está trabajando en Buenos Aires también mostró su aguante. Los muchachos pusieron una bandera y sufrieron como locos. Esto tiene que ver porque uno de los integrantes, Diego Apud, es fanático del Tomba y no se perdió el encuentro.

FUENTE
DIARIO LOS ANDES (MENDOZA)